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Hoy vamos a explicar qué es un injerto capilar, dónde nació, quienes fueron sus creadores, y cómo ha ido evolucionando a lo largo de la historia hasta la actualidad.
Conocido también como trasplante capilar, microinjerto capilar, cirugía capilar, implante de pelo, microtransplante folicular… Pero a pesar de sus distintos nombres busca una única solución, poner fin a la alopecia.
El injerto capilar se ha convertido en el tratamiento estrella de cualquier clínica capilar. En este blog os vamos a demostrar por qué
¿Qué es un Injerto Capilar?
Es un procedimiento médico que consiste en trasplantar el pelo. Se trasplanta de las zonas donde el cabello se mantiene siempre, en las cuales la genética no actúa, a zonas con escasez o falta de pelo afectadas por la alopecia.
En SERVICAP, esta microcirugía es llevada a cabo por especialistas profesional y experimentados. Como nuestro Médico-estético, licenciado en medicina y tricología (ciencia que estudia el cabello). Y nuestros Técnicos Capilares, diplomados en Enfermería.
Esta intervención consiste en obtener folículos pilosos de la zona donante para después implantarlos en la zona alopécicas a tratar, zona receptora.
Los folículos pilosos se dividen en unidades foliculares de 1,2,3,4… cabellos. Cada unidad está formadas por papila dérmica, folículo, glándula y grasa subcutánea. Por este motivo no es apropiado cortar las unidades foliculares .
La distribución de las unidades foliculares seguirá los patrones estéticos adecuados para una futura evolución del nuevo cabello. Esto se consigue insertando una primera fila con injertos de 1 cabellos y poco a poco ir añadiendo injertos más densos para así proporcionar un resultado natural y recuperar el pelo perdido.
¿Por qué hay zonas que no se ven afectadas por la alopecia y cuáles son?
La aparición de la calvicie común, alopecia androgénica, está inducida por los andrógenos. Estas son las hormonas sexuales masculinas que empieza a producir el varón en la pubertad.
Este tipo de alopecia se produce por la presencia de la enzima 5-alfa-reductasa, la cual convierte la hormona de la testosterona en dihidrotestosterona (DHT). Esto hace que se reduzca el número de folículos pilosos. Por ello, el pelo nuevo empieza a nacer cada vez más débil y fino. Con el paso del tiempo los folículos dejan de funcionar y el pelo que se cae no vuelve a ser reemplazado.
En áreas como la nuca y los laterales de la cabeza la testosterona no se convierte en DHT. Por este motivo estas zonas son las más indicadas como zona donante en un injerto capilar. En otro de nuestro blog mostramos que otras zonas pueden ser candidatas para un injerto capilar.
Historia del Injerto Capilar
El primer trasplante de pelo de la historia realizado con éxito en animales data del año 1800, de la mano del Dr. Baromo.
Pero no es hasta el año 1822 cuando el Dr. Unger, a través de un autotrasplante, considera el trasplante de pelo para tratar la calvicie. Sin embargo, tanto el instrumental como las técnicas empleadas para ello aún eran muy simples. No sería hasta el siguiente siglo cuando se empieza a desarrollar el sector de la medicina capilar. La historia del injerto capilar no había hecho más que empezar.
En 1939 un dermatólogo japonés, el Dr. Okuda, trabajó en la restauración de trasplante de pelo para quemados. En sus estudios describió la técnica punch. Esta técnica consistía en extraer pequeñas secciones circulares de piel con pelo para implantarlas en orificios de menor tamaño. Las áreas implantadas eran zonas quemadas o cicatriciales del cuero cabelludo de estos pacientes quemados. Cuando estas zonas curaban descubrió que los injertos continuaban creciendo y produciendo pelo nuevo en las antiguas áreas quemadas.
Cuatro años después (en 1943) el Dr. Tamura, otro dermatólogo japonés, perfeccionó la técnica del Dr. Okuda. En esta ocasión sus pacientes era mujeres que querían recuperar el pelo en el pubis. La diferencia respecto a la técnica anterior es que el Dr. Tamura utilizaba injertos más pequeños, que contenían sólo de 1 a 3 pelos, para reemplazar el pelo púbico perdido. Esta técnica punch perfeccionada es bastante similar a la técnica que se utiliza actualmente, la técnica FUE.
En la segunda Guerra Mundial, Japón juega un papel muy importante, y los innovadores trabajos científicos de estos dos dermatólogos japoneses se pierden durante casi una década. Varios años después del fin de la guerra estos trabajos se descubren y se comparte la información.
La historia moderna del injerto capilar se inicia en Nueva York con el Dr. Norman Orentreich quien en 1959 realiza el primer trasplante capilar masculino. Utilizó la técnica de injertos punch o sacabocado para realizar el trasplante a un hombre con alopecia androgénica.
En algunos casos dicha técnica producía resultados anti-estéticos. Esto es debido a que los injertos punch son obtenidos con un sacabocado de unos 4 milímetros de diámetro. Su crecimiento en la zona de calvicie o receptora produce un aspecto comúnmente conocido como “pelo de muñeca”.
Tras siete años de muchas críticas, publicó su teoría del Injerto Donante-Dominante. En ella demostró que el pelo de la zona posterior y laterales del cuero cabelludo era resistente a la alopecia y que no todas las áreas sirven como zona donante.
Dado que la técnica del Dr. Orentreich no daba un aspecto natural, el trasplante capilar tuvo una mala reputación social. Hasta mitad de los 90 no volvió a salir a flote. Es entonces cuando aparece la extracción de Unidades Foliculares con Tira o Técnica FUSS (Folicular Unit Strip Surgery).
Sobre el año 2010 se empieza a realizar en España el injerto capilar con Técnica FUE. Desde entonces se ha ido perfeccionando tanto en material quirúrgico utilizado como en las diferentes versiones que ofrece esta técnica.
Tras numerosos estudios los dermatólogos y médicos capilares consideran el trasplante capilar como el único tratamiento que permite recuperar el pelo. En la mayoría de los casos la recuperación capilar es definitiva.
En la actualidad, el injerto capilar es considerado el tratamiento capilar definitivo y el más demandado para solucionar problemas capilares como la alopecia.
En SERVICAP contamos con un equipo médico especialista en tratamientos capilares que domina la Técnica FUE a la perfección para obtener los resultados esperados y más naturales.
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